miércoles, 24 de febrero de 2016

TIERRA DE CAMEROS (II)

... Viene de Tierra de Cameros.


Para recorrer los pueblos del Camero Nuevo, basta con hacerse con un mapa y seguir la Carretera Nacional 111.

Pradillo es una pequeñísima localidad de unos 70 habitantes, a 40km de Logroño y en el corazón del Camero Nuevo. Nosotros siempre reservamos un día para ir allí, ya que nos gusta comer en el Restaurante Los Cucharones, que está en la misma carretera al lado del Ayuntamiento. Es un restaurante de lo más rústico, con su chimenea de piedra y los platos del día escritos a boli en un folio. Si podéis, probad los caparrones con sus sacramentos (así, tal cual) y las tartas caseras.

De todas formas, Pradillo es de visita “semi obligada”, ya que allí se encuentra la Oficina de Turismo de Cameros, en un edificio denominado el Hórreo. Gestionada por la Asociación Altura, os darán todo tipo de información sobre rutas y alojamiento e incluso venden algún producto de la zona. Justo al lado del Hórreo, está la Iglesia de San Martín y si dais un paseo por los alrededores, hay hasta tres ermitas para visitar y un puente de piedra para contemplar el paso del río Iregua. Una curiosidad de este pueblo son los hornos en altura, antiguos hornos de pan que están construidos en la pared de piedra de las casas sobre voladizos de madera. Aunque no están señalizados, nos fijamos en ellos gracias a las indicaciones de los lugareños.

Puente de Pradillo sobre el Iregua

Si seguís la N-111 dirección Soria, encontraréis un desvío a Villoslada de Cameros. Este municipio ya está dentro del Parque Natural de la Sierra Cebollera. Su casco urbano, como la mayoría pueblos de la zona, está construido a diferentes niveles, culminando en la Iglesia de Ntra. Sra. del Sagrario. Se conserva un bonito puente medieval sobre el río Iregua que da testimonio de la antigua calzada romana y también varios caseríos de piedra. A las afueras, en un edificio de arquitectura contemporánea, está el Centro de Interpretación del Parque Natural, adonde debéis dirigiros si necesitáis información climatológica, rutas, participar de actividades en el parque, etc.

A nosotros nos gusta visitar los bosques de alrededor de la Ermita de la Virgen de Lomos de Orios. Para llegar, hay que seguir durante unos 9 km la carretera que parte de Villoslada. Accederéis a una zona boscosa de pinos y robles y rodeada de altas montañas, en uno de cuyos claros está la ermita. Algunos de los picos superan los 2000 m, como la Mesa de Cebollera. La ermita, es en realidad un conjunto de edificios formado por el propio templo barroco y por la casa del santero (que vive allí). La ermita estuvo y está muy vinculada a la trashumancia y un par de veces al año se celebran romerías. La Virgen, que tiene muchos devotos en La Rioja, está representada en una talla románica en su interior.

Partiendo del aparcamiento podéis escoger entre diversas excursiones y paseos de varios niveles de dificultad. Nuestra excursión favorita es la que lleva a las Cascadas de Puente Rá en unas dos horas (aunque nosotros nos entretenemos tanto que ocupamos toda una mañana). Hay que seguir la misma carretera por la que habéis llegado, hasta encontrar la pista que os llevará en descenso por un pinar hasta la Majada de las Desecadas. Allí veréis la señalización a las Cascadas del Arroyo de Puente Rá, afluente del Iregua. Es una zona muy apreciada también por los micólogos y en la época en la que nosotros vamos, hay mucha variedad de setas, además de un entorno otoñal precioso.


De Villoslada a Lomos de Orios, Noviembre 2011

Camino de Puente Rá, Noviembre de 2011

Saliendo de Pradillo, si en lugar de seguir la nacional 111 hacia el sur la seguís hacia el norte dirección Logroño, llegaréis a la capital de la comarca, Torrecilla en Cameros. El trozo de carretera entre Pradillo y Torrecilla es espectacular, ya que discurre entre el río Iregua y la pared de la montaña. Desde esta misma carretera podéis obtener una bonita imagen de Torrecilla, con sus casas construidas sobre la falda del Serradero, entre las cuales destaca la Iglesia de San Martín. Pero la mejor imagen la tomaréis desde el Mirador, en la zona más alta a las afueras del pueblo, junto a la ermita de San Antón y la estatua del Santo. En nuestra opinión, Torrecilla no tiene tanto atractivo como los pueblos más pequeños de su alrededor, pero siempre acabamos pasando por aquí para hacer alguna compra o sacar dinero en el cajero automático.

--- Escapada al Camero Viejo ---

Una zona muy interesante para aquellos a los que les gusta unir el turismo con el senderismo y la observación de aves, es la localidad de Soto en Cameros  con el Cañón del río Leza.



En aproximadamente 50 minutos desde nuestro campo base en El Rasillo, llegamos a la localidad de Soto en Cameros, perteneciente al Camero Viejo.  A Soto se accede desde Logroño (a 26 Km de distancia) por la LR-250. El núcleo urbano, como es tan característico en la zona, ha crecido en el Valle del Leza y se va escalonando por las laderas de la montaña quedando así resguardado del viento y aprovechando el sol. Los barrios de ambas laderas quedan unidos por un puente de piedra sobre el río. Hay varios edificios interesantes, como el albergue, que era un antiguo hospital, el Ayuntamiento, que eran las antiguas escuelas, o el Palacio. Por encima de todos ellos, destaca la Iglesia de San Esteban, construida en piedra y en desnivel, debido al terreno en que se encuentra. Pero la zona más bonita en nuestra opinión, está a las afueras. Es la Ermita de la Virgen del Cortijo, a la se llega dando un paseo hasta llegar a la cima del cerro. Desde allí hay una panorámica muy bonita del valle.

Soto en Cameros desde el cerro del Cortijo

Soto en Cameros, Noviembre 2011

Ermita de la Virgen del Cortijo, Noviembre 2011

En el área de la ermita veréis la señalización de la Ruta del río Leza que además pasa por dos importantes yacimientos de icnitas (huellas de dinosaurio), llamadas Soto 1 y Soto 2. La primera de ellas está a unos 20 minutos del inicio de la ruta y la segunda a unos 50. Es muy curioso, las huellas se ven perfectamente gravadas en la roca. En el pueblo os facilitarán información sobre la historia de los yacimientos y las especies de dinosaurios que campaban a sus anchas por la zona. El otro gran aliciente de la ruta, es por supuesto el cañón. El Leza ha erosionado la roca caliza del valle a lo largo de los siglos, creando un cañón impresionante. Hay un mirador justo en la zona del segundo yacimiento, desde donde es muy  probable que podáis ver las rapaces sobrevolando el río. Durante el otoño el recorrido es espectacular.

Cañón del Río Leza, Noviembre 2011

Huellas 

Huellas

Evidentemente, la comarca de Cameros no es sólo esto... pero esto es un pequeña muestra de lo que vais a encontrar en una zona bastante desconocida. Por lo menos para nosotros lo era.

¿Y qué son los Cameros? Pues los camberos eran los antiguos pobladores de la sierra, pastores cántabros y berones, que vivían de la ganadería y que en otoño peregrinaban hacia tierras más verdes, como Extremadura, dejando a sus familias en las montañas. Actualmente el recuerdo de este pasado de trashumancia sigue muy vivo entre los cameranos.


http://www.turismorioja.com/altura/?idc=21
http://www.elrasillodecameros.com/
http://www.ortigosadecameros.org/
http://www.aytopradillo.org/Turismo.4579.0.html
http://www.villosladadecameros.org/
http://www.sotoencameros.org/

RELATO DE VIAJE A LA RIOJA, por Miriam

miércoles, 17 de febrero de 2016

TIERRA DE CAMEROS

Este relato de viaje a La Rioja es un resumen combinado de varias escapadas a la Sierra de Cameros.

Como ya he comentado en alguna entrada anterior, desde hace varios años acostumbramos a hacer  una escapada de otoño a alguna zona rural. En una de estas mini vacaciones, descubrimos una zona que nos tiene enamorados y a la que hemos vuelto hasta tres veces.  Se trata de la comarca de Cameros, o también Sierra de Cameros, en La Rioja. Y no, no es zona de vinos.
La comarca, situada en la Rioja Media, está a su vez dividida por una cadena montañosa en dos subcomarcas, el Camero Viejo y el Camero Nuevo. Nosotros pasamos nuestras vacaciones en esta última.
El Camero Nuevo está situado en el Valle del río Iregua, que es afluente del Ebro y comparte una mínima parte de su territorio con la provincia de Soria, al sur. Está formado por trece municipios de los cuales, Torrecilla en Cameros actúa como capital. Es zona de tradición pastoril, montañas y bosques y pueblos de piedra y madera. Realmente es una comarca de fácil acceso, ya que está atravesada por la Nacional 111 que conecta Logroño con Soria en alrededor de hora y media. Desde Soria se accede a Cameros a través del Puerto de Piqueras, entrando directamente en el PN de la Sierra Cebollera, el único parque natural de La Rioja.
Esta es la zona que solemos recorrer cuando estamos en Cameros:


Nuestro campo base siempre es El Rasillo de Cameros. Para acceder hay que abandonar la carretera nacional y entrar en la sierra por la LR-253. No es extraño que fuésemos a parar aquí, ya que éste es el municipio con más oferta de alojamiento de la zona y la mayor parte de su población, unos 150 habitantes, vive del turismo. Es un precioso pueblo de casas y pendientes de piedra, rodeado de bosques  y praderas.  En el centro, a los pies de la iglesia parroquial Nuestra Señora de las Heras, encontramos un árbol muy querido y protegido debido a su vejez: el olmo centenario del Rasillo, con 400 años a sus espaldas. Saliendo del pueblo por la Avenida de San Mamés, llegamos a la ermita románica del mismo nombre, en un paseo de unos minutos.                                
 A escasos quilómetros encontramos el embalse González Lacasa. Es accesible tanto en coche como andando, gracias a la Senda Verde que parte de los pies del pueblo y que lleva directamente a él. En el embalse, el Club Náutico del Rasillo, ofrece restaurante y posibilidad de practicar varios deportes acuáticos  (nosotros siempre hemos ido a finales de otoño, así que nunca los hemos disfrutado).
Nos alojamos en la Casa Rural El Olmo. La primera vez fuimos sin conocerla y ya no hemos querido cambiar. Reservamos siempre un apartamento para 2/3 personas que está en la planta baja, pero además ofrecen habitaciones con desayuno incluido y alquilan el ático. Los propietarios, Blanca y Rufi, se encargan de sus clientes como si de su familia se tratase. Tiene un precioso jardín con vistas al embalse, donde tomar el sol. La casa está en la carretera, no en el pueblo, pero a una distancia de 5 minutos andando, allí todo está cerca. A nosotros nos gusta pasar el día fuera, cenar pronto en casa y después acercarnos al pueblo andando por la carretera absolutamente silenciosa, para ir a tomar “la última” en uno de los tres bares que hay alrededor de la plaza. 


El Rasillo de Cameros, Noviembre de 2013
Iglesia de El Rasillo, Noviembre de 2014

El entorno natural en otoño es absolutamente alucinante. Los bosques de pinos y robles se tiñen de cientos de tonos marrones, ocres, verdes, amarillos… Nuestra actividad estrella (quizás no deberíamos contarlo aquí) es salir de buena mañana con las botas de montaña y volver a casa cargados de setas. Ellos son amantes de los boletus, pero no tanto de los níscalos (rovellons) y solemos cogerlos a manos llenas a dos pasos de la casa.




Alrededor del embalse hay una serie de pueblos que bien merecen una visita. El que más nos gusta a nosotros es Ortigosa de Cameros, por su emplazamiento, la distribución de sus casas, sus callejuelas laberínticas... El pueblo se extiende a ambos lados del valle que forma el río Alberco y sus casas están construidas sobre dos empinadas laderas, formando dos barrios, San Martín y San Miguel. Tradicionalmente ha sido lugar de pastoreo y estas laderas son soleadas y están resguardadas de las inclemencias del tiempo. Ambos barrios están arremolinados alrededor de su respectiva iglesia. Para salvar el río y unir las dos zonas, se construyó el conocido como Puente de Hormigón, la imagen más fotogénica de Ortigosa. La máxima altura que alcanza sobre el Alberco son 60 metros.

Ortigosa de Cameros, Noviembre 2011

Puente de Hormigón de Ortigosa

Otra de las bazas turísticas de este municipio son sus cuevas. Las Cuevas de Ortigosa están bajo el macizo del Encinedo, a la entrada del pueblo, aunque también se puede acceder a ellas por un empinado camino desde la plaza central. Están formadas por dos grutas, de La Paz y de La Viña, y sólo pueden visitarse con guía. Para nuestra pena, están cerradas de Noviembre a Marzo, así que nunca las hemos llegado a visitar.
Como recomendación, es buena idea comer en El Casino, lugar de reunión y tertulia de los habitantes de Ortigosa. Está situado en una esquina de la plaza y ofrece buenos platos típicos de la zona, de esos de cuchara que nos gustan tanto. También recomendamos los patés de El Robledillo, una pequeña empresa agroalimentaria cuya tienda está en el mismo casco urbano.

Acceso a las Cuevas de Ortigosa

Callejuelas, Noviembre 2014


RELATO DE VIAJE A LA RIOJA, por Miriam